El
atentado del 20 de julio de 1944 fue un intento fallido de asesinar a
Adolf Hitler, llevado a cabo por un grupo de oficiales de la
Wehrmacht (Ejército alemán) organizados por el coronel conde
Claus von Stauffenberg como parte de un
golpe de estado basado en la denominada
Operación Valquiria, un plan operativo de las reservas del ejército a ser puesto en práctica en caso de disturbios civiles o de una sublevación de los millones de trabajadores de las fábricas alemanas.