La
competición es una disposición en la práctica de un
juego o actividad con la que se evalúa la competencia de los participantes. Se suele obtener como resultado una clasificación de ganadores y otorgar algún tipo de reconocimiento para los mejores, tal como un
trofeo, premio económico o título, en función del cumplimiento de un objetivo. Una competición se distingue del juego practicado con una mera finalidad
recreativa, donde no se determina objetivo ni honor alguno.