Juan Santos Atahualpa (¿
Cuzco,
1710? -¿?) fue el
dirigente quechua de una importante rebelión
indígena que estalló en
1742, cuyo propósito era restaurar el
Imperio de los incas y expulsar a los españoles y negros. Al frente de las tribus selváticas, logró controlar un extenso territorio de la selva central del
Virreinato del Perú, amagando la sierra central. Si bien la rebelión no llegó a extenderse más allá de esos límites, tampoco pudo ser sometida por la autoridad virreinal. Juan Santos desapareció misteriosamente hacia el año 1756, desconociéndose la fecha y las circunstancias de su fallecimiento.