Las
leónidas son una
lluvia de meteoros que se produce cada año entre el
15 y el
21 de noviembre, alcanzando un máximo de intensidad cada 33 años; las leónidas muestran un pico de actividad debido a que el polvo del
cometa Tempel-Tuttle no está distribuido homogéneamente a lo largo de su
órbita. En años normales, las leónidas producen tasas del orden de diez a quince meteoros por hora.
Denison Olmsted, profesor de la
Universidad de Yale, observó que los trazos de los meteoros parecían provenir de la constelación de
Leo, lo que dio su nombre al fenómeno.