La
ley de Lenz para el campo
electromagnético relaciona cambios producidos en el campo eléctrico en un conductor con la variación de flujo magnético en dicho conductor, y afirma que las tensiones o voltajes inducidos sobre un conductor y los campos eléctricos asociados son de un sentido tal que se oponen a la variación del flujo magnético que las induce. Esta ley se llama así en honor del físico germano-báltico
Heinrich Lenz, quien la formuló en el año
1834. En un contexto más general que el usado por Lenz, se conoce que dicha ley es una consecuencia más del
principio de conservación de la energía aplicado a la energía del campo electromagnético.