La
Literatura comparada es quizás el campo más influyente de la
Comparatística y un sector metodológico distintivo de la
Filología y su serie disciplinar
Ciencia de la literatura, esto es de la
Historia de la literatura, la
Teoría literaria y la
Crítica literaria. La Literatura comparada no es propiamente una
disciplina sino una
metodología, según demuestra su carácter transversal común no ya a las disciplinas de la Ciencia literaria y de la Ciencia del lenguaje, es decir al conjunto de la Filología, sino en general a las
Ciencias Humanas, e incluso pudiérase decir que a toda ciencia. La Literatura comparada se ocupa de las realidades literarias de distintas regiones como manifestaciones análogas de un mismo fenómeno cultural, razón por la cual cabe afirmar que pone de manifiesto el fondo compartido subyacente a las diversas realizaciones así como los vínculos o relaciones establecibles entre las mismas.En este sentido, su objeto es
universalista y, por tanto, evidentemente
plurinacional (por su atención a literaturas diversas; también disciplinas) o de perspectiva
supranacional (por cuanto indaga aspectos o elementos que trascienden lo particular).Así, pues, los problemas que aborda derivan de esa universalidad: relaciones bien
de facto o bien por analogía, ya relativas a asuntos tematológicos, poetológicos, genológicos o de cualquier otra índole según artes y disciplinas.