La
Magna Mater,
Mater Magna, o simplemente
Gran Madre, fue una divinidad de origen frigio. Fue la gran diosa
anatólica por excelencia, y la Madre Tierra en
Frigia. Su culto se difundió pronto por la cuenca mediterránea gracias a la diáspora de incontables esclavos frigios. Floreció durante seis siglos, los tres inmediatamente anteriores y posteriores al nacimiento de
Jesucristo.