La acción prolongada de la erosión en las cadenas montañosas y en los macizos antiguos ocasiona lo que se denomina en
Geomorfología (y también en
Geología y en
Ciencias de la Tierra), una
inversión del relieve proceso en el que, a través de un largo período, se origina un desgaste mayor y más acelerado de las partes que originalmente estaban más elevadas y, por el contrario, una erosión mucho menor y más lenta en las zonas que en un principio estaban más bajas.