La
Summa Theologiae (escrita entre 1265 y 1274) título en
latín de
"Suma Teológica" y que algunos citan simplemente como la
Summa, es un tratado de
teología del siglo XIII, escrito por
Santo Tomás de Aquino durante los últimos años de su vida —la tercera parte quedó inconclusa. La explicación que dio a este cese en su producción literaria, en sus propias palabras, fue la siguiente: "Después de lo que el Señor se dignó a revelarme el día de San Nicolás, todo lo que he escrito parece como paja para mí, y por eso no puedo escribir ya nada más." La obra fue completada póstumamente por sus discípulos (entre ellos, por su secretario, amigo y confesor, fray Reginaldo de Piperno). Es la obra más famosa de la teología medieval, y su influencia sobre la filosofía posterior, sobre todo en el catolicismo, es muy amplia. Concebida como un manual para la educación teológica, más que como obra
apologética destinada a polemizar contra los no católicos, ejemplifica el estilo intelectual de la
escolástica en la estructura de sus artículos. Se relaciona en parte con una obra anterior, la
Summa Contra Gentiles, de contenido más apologético, estructurada para refutar una a una las
herejías conocidas o las otras religiones.