Yahveh,
transcripción y pronunciación
hebraísta; en
hebreo antiguo יהוה (pronunciación tradicionalmente omitida y por ello desconocida debido a que el hebreo antiguo se escribía solo con consonantes);
transliteración del
tetragrámaton «YHWH» o «JHWH» y su pronunciación conjetural (
Yahweh,
Yahvé,
Yah y
Yavé así como la acepción
Iehová, Jehowah o Jehová). Es, en dicho modo, el
nombre propio utilizado en la
Biblia (en la
lengua española; y en muchas otras traducciones bíblicas) para designar y diferenciar al
Dios de las religiones judeocristianas. En su forma hebrea es, en el
Antiguo Testamento, el nombre que utiliza para referirse a sí mismo, siendo su significado presumiblemente una descripción de su propia naturaleza.