La fue una batalla decisiva en la historia de Japón que tuvo lugar el 21 de octubre del año 1600 (Keichō 5, decimoquinto día del noveno mes según su antiguo calendario) en Sekigahara (hoy prefectura de Gifu). Durante este conflicto se enfrentaron los ejércitos de las dos principales facciones del país: por una parte, quienes consideraban que Toyotomi Hideyori, hijo de uno de los grandes unificadores del Japón, Toyotomi Hideyoshi, era quien debía convertirse en el dirigente del país. Por otra parte, la facción de los que apoyaban a Tokugawa Ieyasu, uno de los daimyō (señores feudales) más prominentes del país, para que se convirtiera en el dirigente.