La
física de la materia condensada es el campo de la
física que se ocupa de las características físicas macroscópicas de la
materia. En particular, se refiere a las
fases “condensadas” que aparecen siempre en que el número de constituyentes en un sistema sea extremadamente grande y que las interacciones entre los componentes sean fuertes. Los ejemplos más familiares de fases condensadas son los
sólidos y los
líquidos, que surgen a partir de los enlaces y uniones causados por interacciones
electromagnéticas entre los
átomos. Entre las fases condensadas más exóticas se cuentan las fases
superfluidas y el
condensado de Bose-Einstein, que se encuentran en ciertos sistemas atómicos sometidos a temperaturas extremadamente bajas, la fase superconductora exhibida por los electrones de la conducción en ciertos materiales, y las fases
ferromagnética y
antiferromagnética de
espines en
redes atómicas.