Las
falanges de la mano (
Phalanges digitorum manus) son huesos largos —pues predomina la longitud sobre el grosor y la anchura—, en número de tres para cada dedo (excepto el
pulgar, que tiene dos), denominados, comenzando a contar desde el
metacarpo o el
metatarso: 1ª, 2ª y 3ª o proximal, media y distal (en la antigua nomenclatura
falange,
falangina y
falangeta). Cada una consta de dos caras: anterior y posterior; y dos extremos: proximal y distal (superior e inferior), articulares ambos en la 1ª y 2ª, y solo el superior en la 3ª.