La
hematosis (del griego αἱμάτωσις [
aimátosis], ‘cambio en sangre’) es el proceso de intercambio gaseoso entre el
ambiente exterior y la
sangre de un
animal, cuya finalidad es la fijación de
oxígeno (O
2) y la eliminación de
dióxido de carbono (CO
2) durante la
respiración. En todos los organismos se produce por
difusión simple, es decir, a favor del gradiente de
presión parcial y sin gasto
energético. Por ello la presión parcial del oxígeno en el ambiente exterior es determinante en el proceso, y el organismo responde de diversas maneras a las variaciones de esta magnitud.