Un
horno, palabra proveniente del
Latín furnum, es un dispositivo que genera
calor y que lo mantiene dentro de un compartimento cerrado. Se utiliza tanto en la
cocina para cocinar, calentar o secar alimentos, como en la industria. La energía calorífica utilizada para alimentar un horno puede obtenerse directamente por combustión (leña, gas u otro combustible), radiación (luz solar), o indirectamente por medio de electricidad (horno eléctrico).