En
mecánica, se llama
impulso a la
magnitud física, denotada usualmente como
I, definida como la variación en el
momento lineal que experimenta un
objeto físico en un sistema cerrado. El término difiere de lo que cotidianamente conocemos como impulso y fue acuñado por
Isaac Newton en su
segunda ley, donde lo llamó
vis motrix, refiriéndose a una especie de fuerza del movimiento.