En
medicina, se denomina
isquemia (del
griego ἴσχειν,
ísjein, ‘detener’ y αἷμα,
aíma, ‘
sangre’) al estrés
celular causado por la disminución transitoria o permanente del riego sanguíneo y consecuente disminución del aporte de
oxígeno (
hipoxia), de nutrientes y la eliminación de productos del metabolismo de un tejido biológico. Este sufrimiento celular puede ser suficientemente intenso como para causar la
muerte celular y del tejido al que pertenece (
necrosis). Una de las funciones principales de la sangre es hacer que el oxígeno tomado por los
pulmones y nutrientes circulen por el organismo y lleguen a todos los
tejidos del cuerpo.