Los
lagos de lava son grandes volúmenes de
lava derretida, usualmente
basáltica, contenida en una boca volcánica, o un
cráter volcánico, o una extensa depresión. Los científicos usan este término para referirse a los lagos de lava derretida o también para aquellos casos en que la lava está parcialmente o totalmente solidificada. Los lagos de lava pueden formarse de tres maneras distintas:
- A partir de una o más bocas de ventilación en un cráter que hace erupción con suficiente cantidad de lava como para llenar parcialmente el cráter volcánico.
- Cuando la lava se derrama en un cráter o una depresión llana y es parcialmente llenada.
- Encima de una nueva boca de erupción donde la lava fluye continuamente durante semanas o más y lentamente se va formando un cráter cada vez más grande sobre el terreno circundante.