Una
capa electrónica,
capa de electrones o
cubierta de electrones puede pensarse como el conjunto de
órbitas seguidas por un grupo de
electrones alrededor del
núcleo de un
átomo. Cada capa puede contener un cierto número máximo de electrones, y está asociada con un particular rango de energía en función de su distancia al núcleo. En un átomo estable, para que una cierta capa pueda contener electrones, es necesario que todas las interiores a ella estén completamente ocupadas. Los electrones en la capa poblada más externa, llamada
capa de valencia y que es la única que puede encontrarse parcialmente vacía, determinan las
propiedades químicas del átomo.