La
Operación León Marino (en
alemán:
Unternehmen Seelöwe) fue un plan alemán para invadir
Gran Bretaña durante la
Segunda Guerra Mundial. La invasión no llegó a ejecutarse, si bien sus preparativos fueron muy intensos y la amenaza de invasión se mantuvo durante bastante tiempo, primero para mantener una presión psicológica sobre el pueblo y el gobierno británicos, y posteriormente para encubrir los planes alemanes de ataque contra la
Unión Soviética.