La
salinidad es el contenido de sales minerales disueltas en un
cuerpo de agua. Dicho de otra manera, es válida la expresión
salinidad para referirse al contenido salino en suelos o en agua. El sabor salado del
agua se debe a que contiene
cloruro de sodio (NaCl). El porcentaje medio que existe en los océanos es de 3,5% (35 gramos por cada litro de agua). Además esta salinidad varía según la intensidad de la evaporación o el aporte de agua dulce de los ríos aumente en relación a la cantidad de agua. La acción y efecto de disminuir o aumentar la salinidad se denomina
desalinización y
salinización, respectivamente. Por cierto, la mayoría de los lagos son de agua dulce. Pero, en las masas de agua de mayor salinidad, es más posible flotar con facilidad. Aunque, aun así en la hidrósfera, se ha comprobado que la mayor parte de la agua, es salada.