El
homicidio es un
delito que consiste en una acción u
omisión mediante el cual se priva de la vida a otra persona ya sea dolosa o culposamente. El término procede etimológicamente del latín
homicidĭum, un compuesto de
homo, "ser humano", y
caedere, "matar", de modo que literalmente significa "matar a un ser humano". Es una conducta reprochable, es decir típica, antijurídica y por regla general culpable (excepto en casos de inimputabilidad, donde no es culpable pero sí responsable penalmente), que consiste en atentar contra el
bien jurídico de la vida de una
persona física.