Un
patois (en
francés, pronunciado [patwa]) es una
variedad lingüística esencialmente oral, hablada en un ámbito geográfico limitado, que puede reducirse a una localidad o a un conjunto de localidades, generalmente rurales. Es un sistema lingüístico reducido, sin estatus cultural o social estable, que depende de un
dialecto del que se distingue por numerosos rasgos
fonológicos,
morfosintácticos y
lexicales. La jerarquización entre
lenguas, dialectos y
patois corresponde más a la
sociolingüística que a la lingüística descriptiva, dado que cualquier variedad lingüístisca, cualquier
patois, es un sistema lingüístico en sí, y por lo tanto una lengua, sin que por ello dos
patois vecinos constituyan dos lenguas distintas. Los
dialectólogos prefieren llamar «dialecto» a las variedades geográficas de un conjunto más extendido al que llaman «lengua», pudiendo cada dialecto dividirse a su vez en subvariedades.