La cultura de Hallstatt es una cultura arqueológica perteneciente al Bronce final y la I Edad del Hierro. Fue Paul Reinecke quien primero asimiló el yacimiento de Hallstatt con los campos de urnas, creando una periodización que actualizó posteriormente Müller-Karpe. Así, Hallstatt formó parte de los campos de urnas y, a su vez, fue heredera de estos, manteniendo una clara continuidad, sin rupturas. Sin embargo, también recibió influencias diferenciadoras gracias a sus contactos con el norte de Italia (Golasecca), con colonos mediterráneos a través del Adriático y también de los pueblos de las estepas de la Europa Oriental.