El
esmalte heráldico designa el atributo cromático de un
campo o de un fondo. Se trata de colores simbólicos: así el gules se representa por un rojo sea bermellón, escarlata, carmín u otro. Los esmaltes están repartidos en tres grupos:
- los metales, compuestos esencialmente del oro y el plata;
- los colores, compuestos esencialmente del azur, del gules, del sable, del sinople y del púrpura;
- los forros, compuestos esencialmente del armiño y del vero, así como de sus innumerables variantes; son de hecho composiciones "bicromáticas", reuniendo un esmalte con un metal.