Los
Reales Estudios de San Isidro fueron un centro de enseñanza fundado oficialmente por
Felipe IV en
Madrid,
España, en
1625 e inaugurados en
1629, como continuación de los Colegios vinculados a los
jesuitas que, a finales del siglo XVI, habían obtenido el favor y apoyo de la Corte española. Se encontraban en la actual calle Toledo, en la que, actualmente, se halla el
Instituto San Isidro.