El
reino de Polonia fue un estado medieval de la
Europa oriental creado el
18 de abril de
1025 por la coronación de
Boleslao I el Bravo como rey de
Polonia en lo que antes había sido el
ducado de Polonia. Boleslao se hizo coronar rey tras la muerte del emperador germánico
Enrique II, pero con el fallecimiento del monarca polaco, su título y el rango del estado polaco desaparecerían. Sería en
1295 cuando Polonia ascendería legal y definitivamente al rango de reino y sus descendientes ostentarían el título hereditario de rey iniciando con
Premislao II (1257-1296).