La
digestión anaeróbica es el proceso en el cual
microorganismos descomponen material
biodegradable en ausencia de
oxígeno. Este proceso genera diversos gases, entre los cuales el
dióxido de carbono y el
metano son los más abundantes (dependiendo del material degradado). En
biodigestores se aprovecha esta liberación de gases para luego ser usados como
combustible. La intensidad y duración del proceso anaeróbico varían dependiendo de diversos factores, entre los que se destacan la
temperatura y el
pH del material biodegradado.
La digestión anaeróbica (DA) es un proceso multietapas que puede ser resumido en cuatro etapas,
- En la primera se debe hidrolizar los compuestos de mayor peso molecular, tanto los disueltos como los no disueltos, por medio enzimas (por ejemplo, amilasas y proteasas), en esta primera etapa se hidrolizan polímeros tales como polisacáridos, lípidos, proteínas y ácidos nucleicos, formándose los correspondientes oligómeros y monómeros (azúcares, alcoholes, ácidos grasos, glicerol, polipéptidos, aminoácidos, bases púricas, y compuestos aromáticos).
- La segunda etapa la llevan a cabo bacterias acidogénicas que transforman los oligómeros y monómeros a ácidos grasos volátiles (ácidos: acético, propiónico, butírico y valérico principalmente)
- Las bacterias acetogénicas en la tercera etapa transforman los ácidos grasos volátiles (AGV) en ácido acético, para que a su vez las bacterias metanogénicas acetoclastas,
- En la última etapa, los transformen en metano (CH4) y dióxido de carbono (CO2), en esta cuarta etapa participan también las bacterias hidrogenotróficas, que mantienen el equilibrio del hidrógeno (H2) en el medio, utilizándolo para reducir el CO2 a CH4.