El
hebreo tiberiano es una tradición oral de la pronunciación de formas antiguas del hebreo, especialmente el hebreo del
Tanaj, escrita por los miembros de la escuela masorética de la comunidad judía de
Tiberíades, en la temprana
Edad Media, a los inicios del siglo VIII. Utiliza
diacríticos llamados
Niqud para las vocales y signos de "cantillación" añadidos a las letras del alfabeto tradicional. Si bien estos símbolos comenzaron a usarse en la temprana edad media, la tradición oral que reflejan es mucho más antigua.