Millones de instrucciones por segundo o
MIPS (del inglés
millions of instructions per second) es una forma de medir la potencia de los
microprocesadores. Sin embargo, esta medida solo es útil para comparar procesadores con el mismo
conjunto de instrucciones y usando
benchmarks que fueron compilados por el mismo
compilador y con el mismo nivel de optimización. Esto es debido a que la misma tarea puede necesitar un número de instrucciones diferentes si los juegos de instrucciones también lo son; y por motivos similares en las otras dos situaciones descritas. En las comparativas, usualmente se representan los valores de pico, por lo que la medida no es del todo realista. La forma en que funciona la
memoria que usa el procesador también es un factor clave para la potencia de un procesador, algo que no suele considerarse en los cálculos con MIPS. Debido a estos problemas, los investigadores han creado pruebas estandardizadas tales como SpecInt para medir el funcionamiento real, y las MIPS han caído en desuso.