La
libertad condicional es una medida alternativa a una
pena privativa de libertad, como la
prisión o el
arresto domiciliario, que contemplan los
ordenamientos jurídicos de algunos países, y que es posible imponer en la
sentencia cuando se cumplen ciertos requisitos establecidos en la
ley, que le permite al condenado por un
delito cumplir su sanción penal en
libertad, aunque sujeto a ciertas obligaciones o bajo ciertas condiciones, por ejemplo, no cometer nuevos delitos o
faltas. En caso de incumplir tales condiciones, la persona a la cual se le ha concedido la libertad condicional debe cumplir su condena en la
cárcel.