En la
mitología griega, las
musas (en
griego antiguo μοῦσαι
mousai) eran, según los escritores más antiguos, divinidades
inspiradoras de la
música y, según las nociones posteriores, divinidades que presidían los diferentes tipos de
poesía. Originalmente fueron consideradas
ninfas inspiradoras de las fuentes, cerca de las cuales eran adoradas; y llevaron nombres diferentes en distintos lugares, hasta que la adoración
tracio-beocia de las
nueve Musas se extendió desde
Beocia al resto de las regiones de
Grecia y al final quedaría generalmente establecida.