El
aparato genital femenino (o
aparato reproductor femenino) se compone de dos partes: el
útero, que alberga el feto en desarrollo, produce secreciones
vaginales y uterinas, y que traslada el
esperma a las
trompas de Falopio; y los
ovarios, que producen los ovocitos o gametos femeninos. Estas partes son internas; la
vagina es el canal que comunica con los órganos externos en la
vulva, que incluye los
labios genitales, el
clítoris y el meato de la
uretra. La vagina está unida al útero a través de la
cérvix, mientras que el útero está unido a los ovarios vía las trompas de Falopio. Si, durante el tránsito, se encuentra con
esperma, un espermatozoide puede introducirse y fusionarse con el óvulo,
fecundándolo. El equivalente en hombres es el
aparato genital masculino.