El fue una familia aristocrática japonesa dominante en el
siglo VII y contribuyente de introducir el
budismo al
Japón. Durante los siglos V y VII, monopolizaron el Kabane, es decir los rangos hereditarios correspondientes al gran
Omi, además fue una de las primeras familias nobles en tener un poder político sobre la casa imperial lo que les permitió dominar el gobierno y los ordenes sucesorios.