En el cristianismo católico y ortodoxo la
Coronación de la Virgen es una secuencia más dentro del ciclo de la vida de la Virgen María. Pertenece esta creencia a la tradición y su referencia en los libros sagrados de la
Biblia se encuentra en el capítulo 12 del libro del Apocalipsis. Su promoción está en un relato atribuido a San
Melitón, obispo de
Sardes (ciudad de
Asia Menor) en el siglo II, que fue divulgada en el occidente cristiano el siglo VI por
Gregorio de Tours y más tarde en el siglo XIII por
Santiago de la Vorágine en su
Leyenda dorada.