Una
extinción masiva es un tipo de
extinción terminal en la cual desaparecen sin descendencia un 10 % o más de las especies a lo largo de un año, o bien un 50 % o más de las especies en un periodo comprendido entre uno y tres millones y medio de años, cuando en momentos normales las extinciones se producen a un ritmo de entre dos y cinco
familias biológicas de
invertebrados marinos y
vertebrados cada millón de años. Desde que la vida empezó en la Tierra se han detectado cinco sucesos en el
eón Fanerozoico tras los cuales se han extinguido más de las mitad de las especies existentes.