Helheim o
Hel, es conocido como el reino de la muerte y se encuentra en la parte más profunda, oscura y lúgubre de
Niflheim, uno de los nueve mundos del
Yggdrasil, en la
mitología nórdica. Estaba gobernado por
Hela, monstruosa hija de
Loki, y la entrada era custodiada por un perro conocido como
Garm. Helheim y Niflheim suelen relacionarse como el mismo mundo, pero esto no es así: Niflheim es el reino del frío, el hielo y la oscuridad, principalmente, y, aunque también son propias en él, la muerte y la perdición, donde se dan estas dos últimas específicamente es en Helheim, la capital de la muerte (por decirlo de alguna manera).