Los
iberos o
íberos fue como llamaron los antiguos escritores griegos a las gentes del levante y sur de la
península ibérica para distinguirlos de los pueblos del interior, cuya cultura y costumbres eran diferentes. De estos pueblos escribieron
Hecateo de Mileto,
Heródoto,
Estrabón o
Rufo Festo Avieno, citándolos con estos nombres, al menos desde el siglo VI a. C.:
elisices, sordones,
ceretanos,
airenosinos,
andosinos,
bergistanos,
ausetanos,
indigetes,
castelanos,
lacetanos,
layetanos,
cossetanos,
ilergetas,
iacetanos,
suessetanos,
sedetanos,
ilercavones,
edetanos,
contestanos,
oretanos,
bastetanos y
turdetanos.