El
anglicanismo podría definirse como la fe, práctica y espíritu de las iglesias miembros de la
Comunión Anglicana, es decir, iglesias en plena comunión con el
Arzobispo de Canterbury. Con todo, el anglicanismo tiene hondas raíces en el pasado:
Rowan Williams describió el Anglicanismo como lo que pasó a la Iglesia en Inglaterra, Gales e Irlanda durante la reforma del siglo dieciséis y posteriormente. Además, tiene raíces hondas en los siglos anteriores: lo medular de la fe de los anglicanos se encuentra en la Biblia, los 39 Artículos de la fe Cristiana, y el
Libro de Oración Común los cuales resumen la enseñanza de la iglesia de los primeros cinco siglos y rechazan tanto la evolución posterior de la Iglesia católica romana como las simplificaciones del unitarismo. Recientemente con las divisiones sobre temas doctrinales y morales, se ha extendido a grupos fuera de la Comunión Anglicana. (ver lista parcial).