Lara, también llamada
Lala:
habladora (del
griego λαλέω, "hablar" ),
Laranda,
Larunda o
Tácita es, en la
mitología romana, el nombre de una
náyade, hija del
dios-río Almón y famosa tanto por su belleza como por su charlatanería. Este último defecto, que sus padres habían intentado corregirle, la hacía incapaz de guardar cualquier secreto.