Un
monumento histórico en
Francia es un
monumento o una
entidad receptora por
decreto (
arrêté) de un estatus jurídico destinado a protegerlo, en razón de su interés histórico, artístico o arquitectónico. Hay dos niveles de protección y un monumento como tal puede ser «clasificado» (
classé) o «inscrito» (
inscrit); la inscripción (conocida hasta 2005 como «à l' inventaire supplémentaire des monuments historiques») protege bienes con un notable interés a escala regional, a diferencia de la clasificación, que protege los monumentos que presentan un interés notable a escala nacional, y que por lo tanto constituye el más alto nivel de protección. En el caso de los bienes inmuebles, en la orden de protección se enumeran las partes del edificio que están protegidas, a menos que lo sea por completo (tanto los elementos exteriores e interiores), así como sus alrededores.