El módulo de conexión
Unity fue el primer componente de construcción
estadounidense de la
Estación Espacial Internacional. Es de forma cilíndrica, con seis conexiones de
atraque situadas (delante, en la
popa, a
babor, a
estribor, en el
cenit, y en
nadir) facilitando conexiones a otros módulos. El
Unity mide 4,57 metros (15 pies) de diámetro, 5,47 metros (18 pies) de largo, y fue construido por la
NASA por
The Boeing Company en unas instalaciones industriales en el
Marshall Space Flight Center en
Huntsville, Alabama. A veces denominado
Nodo 1, el
Unity es el primero de los tres módulos de conexión que formarán parte de la estación una vez esté completa.