Las
regiones de Brasil son cinco grupos de
unidades federales (estados o distritos) en los que se divide la
federación. Están unidos de acuerdo a la proximidad territorial y a características
geográficas como paisajes y tipos de suelo semejantes. La finalidad de la división del país en regiones es estadística y económica. No existe, por lo tanto, ningún tipo de autonomía política de las regiones. Esta división tiene carácter legal y fue propuesta por el
Instituto Brasileiro de Geografia e Estatística (IBGE) en 1969. El IBGE consideró solamente aspectos naturales en la división del país, como el
clima,
relieve,
vegetación e
hidrografía; por esta razón, las regiones también son conocidas como
regiones naturales de Brasil. Hay una pequeña excepción con relación a la región Sudeste, que fue creada tomando en cuenta parcialmente aspectos humanos como el grado de desarrollo industrial y urbano.