El
Reino de Aksum (o
Axum; en
ge'ez: መነገሠ ፡ አከሰመ) fue un importante reino comerciante del noreste de
África entre los siglos I d. C. y X d. C. que se expandió desde los montes de la actual región de
Tigray hasta abarcar gran parte del norte de la actual
Etiopía, ciertas regiones fronterizas de
Sudán, la mayor parte de
Eritrea y parte de la costa occidental de la
península arábiga. Participó activamente en los intercambios comerciales entre la
India y el mundo
mediterráneo y sirvió de punto de encuentro entre el subcontinente indio y el
Imperio romano. Con la caída de Roma y la expansión del Islam el reino, que había adoptado la religión
cristiana, quedó aislado y entró en declive. En ocasiones se le ha confundido con el vecino
reino de Saba del que se habla en la
Biblia y el
Corán y durante la
Edad Media la tradición popular lo convirtió en el mítico reino del
Preste Juan. Basándose en la identificación con el reino de Saba los sucesivos emperadores de Etiopía se consideraron descendientes del rey
Salomón de
Israel y reyes de Axum hasta la abolición de la monarquía en el año 1974. El recinto arqueológico de la actual ciudad de
Aksum fue declarado
Patrimonio de la Humanidad por la
Unesco en 1980.