El
Reino de Colliman fue un estado mesoamericano que floreció en el período posclásico tardío, según los antiguos
glifos, este se representó por medio de un brazo y una mano, que simboliza el dominio ejercido por la fuerza. Los primeros asentamientos en la región datan del siglo V a.C. en el período clásico. Cuando los españoles llegaron a la región encontraron un reino habitado por otomíes llamado
collimán, del que se deriva el nombre actual de
Colima. Sus habitantes tenían cierta organización social y política, con dirigentes cuyo cargo era predominantemente civil, dirigían las manifestaciones religiosas y participaban de la autoridad militar que les transmitía el
Colímotl.