La
corona castrense valar, o vallar, fue la distinción otorgada al combatiente que lograba penetrar en el campo enemigo en primer lugar. Estaba formada por un cerco, normalmente elaborado de
oro, adornado con varias
estacas apuntadas y clavadas que representaban un
vallado. En la
heráldica existen algunos casos en los que todavía se emplea esta corona.