La
corona de infante es la insignia de
este título y está compuesta por un cerco de metal precioso y pedrería decorado con ocho florones con forma de hojas de
acanto, cinco cuando no está realizada en tres dimensiones, que se sostienen sobre puntas elaboradas con el mismo metal que la base. Esta representación heráldica también es utilizada en España para representar en algunos casos la antigua
corona real, abierta, que fue usada hasta el
siglo XVI.