Una
conexión por línea conmutada es una forma económica de
acceso a Internet en la que el cliente utiliza un
módem para llamar a través de la
Red Telefónica Conmutada (RTC) al nodo del
ISP, un
servidor de acceso (por ejemplo:
PPP) y el protocolo
TCP/IP para establecer un enlace módem-a-módem, que permite entonces que se enrute a
Internet. Por influencia del inglés es frecuente que, también en castellano, se llame a este tipo de conexión
dial-up. La desventaja de este tipo de conexión es que es lenta comparada con las conexiones de tipo
línea de abonado digital (DSL), también llamada
Internet flash.