La
fantasía es una
forma musical libre que se distingue por su carácter improvisatorio e imaginativo, más que por una estructuración rígida de los temas. Así, permite al compositor una mayor expresividad musical relajando las restricciones inherentes a otras formas tradicionales más rígidas, como la
sonata o la
fuga. Como ejemplos ilustrativos de este contraste podemos citar la
Fantasía cromática y Fuga de
Johann Sebastian Bach o la
Sonata Op. 27 Quasi una Fantasia de
Beethoven; también se pueden citar las 12 fantasías para violas de
Henry Purcell (Z732 a Z745) o la fantasía en
fa menor del compositor
Frederic Chopin.