La
generosidad del ser humano es el hábito de dar o compartir con los demás. Comparado a menudo con la
caridad como
virtud, la generosidad se acepta extensamente en la sociedad como un hábito deseable. En momentos de
desastres naturales, los esfuerzos de la ayuda son con frecuencia proporcionados, voluntariamente, por individuos o grupos que actúan de manera unilateral en su entrega de tiempo, de recursos, de mercancías, de cobijo, etc.